Los sabores de Mexico se manifiestan en sus creaciones culinarias. Durante la colonizacion española, los sabores del Viejo y del Nuevo Mundo se entrelazan y asi lo demuestran en cada plato que sirven.
Durante la colonizacion, la exquisita comida española se mezclo con los sabores de la tierra de los pueblos conquistados. Lo mejor de ambas culturas permitio a la natural riqueza de America, dar a luz nuevas creaciones culinarias donde confluyeron la cultura indigena mezclada con la del conquistador. Esa mezcla cultural que se deja ver en sus comidas, es muy fuerte en Mexico donde la raiz indigena se refleja en la inclusion del maiz y de frijoles en las comidas junto con las infaltables «tortillas» que son una especie de crêpe de maiz.
Siempre me llamo la atencion la gran aficcion que tienen los mexicanos por los picantes. Es tierra de volcanes y ellos evocan su fuego en cada bocado. Es mas, lo que a uno le quemaria las mucosas, los mexicanos habituados a los picantes, ni lo sienten. Ante la inevitable pregunta de si no sienten el picante, declaran que no, que es mas, si no se lo ponen no le sienten el gusto. Todo les parece soso.
En lo personal, no puedo compartir su placer por los picantes pero si, el gusto por la buena comida que los pueblos centro y sudamericanos heredamos de la Madre Patria, España. Es casi imperdonable pasar una tierra sin conocer un poco de sus costumbres o probar sus frutos, sus aromas. Mexico no fue la excepcion. El lugar para ello en este viaje fue el pueblo pesquero «El progreso» en la peninsula de Yucatan donde los exquisitos platos a base de pescado se mezclaron con tortillas y picantes -muy picantes- que en este lugar, acostumbrados al turismo extranjero, supieron poner a buen resguardo del visitante desprevenido que pudiera no ser su amante tal como es mi caso. Eso es mas dificil de hallar en otros lugares de Mexico donde lo picante, por ser parte intima de la comida local, resulta totalmente inseparable. Recreen la vista!!
Un abrazo de luz
Brinda Mair