Una prueba de fe en la Embajada de Estados Unidos en Argentina es la forma mas clara de explicar como obtuve mi primera visa para viajar a los Estados Unidos.
Mi viaje al Gran Cañon del Colorado en Arizona fue sin duda elegido por el Padre Dios sin la mas minima intervencion de mi parte. Esto se puso de manifiesto cuando llego el momento de ir a al consulado de los Estados Unidos.
Como siempre, la fecha para presentarme a solicitar la visa, me fue indicada por mis guias. Estando alli me di cuenta que poco me habia preparado para ese momento. Hay gente que estaba alli con carpetas y carpetas con documentacion probatoria de su merito y yo cai en la cuenta de que no llevaba nada mas que un sobre vacio.
Cada vez que llamaban a alguien la persona se acercaba al consul y por un altavoz el resto escuchaba su conversacion…
Delante de mi, vi como a comandantes de aerolineas les negaban la visa turistica y lo unico que les permitian era aterrizar con el avion y volver a despegar. Un buen numero de personas abandonaba el lugar enojada o llorando…
Me llamaron y mantuve con el consul norteamericano una conversacion que podria llamarse surrealista. Me pregunto por que queria ir a Estados Unidos. Le respondi que queria estar en el equinoccio de otoño en Sedona. Me respondio diciendome que era mejor lugar Chichen Itza en Mexico. Le dije que ya habia estado.
Asi continuo la conversacion nombrandome lugares del mundo que reemplazarian a Estados Unidos a lo que yo respondia que ya habia estado en el. El clima comenzo a ponerse pesado cuando por un error humano le dije si sabia de las profecias del final de los tiempos… Vi una nube negra formarse sobre mi interlocutor insistiendo de que profecias hablaba y POR QUE queria ir a Estados Unidos… En ese momento en que ya parecia que la energia se cerraba para que no fuera, el Espiritu me mostro un bufalo blanco…. y respondi sin pensar lo que decia: «Quiero ir porque va a nacer un bufalo blanco y se va a cumplir la profecia del final de los tiempos de los indios Hopi y no hay tribus de hopis en ningun otro lugar del mundo mas que en Estados Unidos.»
Cuando se lo dije, el hombre me miro con la resignacion de quien se compadece de un loco no peligroso que no le colocaria una bomba y me dijo simplemente «¡pague!». No inquiri que significaba precisamente esa demanda. Ignoraba si me habian dado la visa o no.
Cuando sali pense: «El Cristo me quiere en USA pero no se por que».
El regalo que recibi de Dios Padre en ese dia en el que celebraba mi cumpleaños galactico, fue una prueba de Fe que solo pide de nosotros estar en el lugar preciso en el momento oportuno.
Al dia siguiente recibi en mi casa mi pasaporte con visa de turismo y de negocios por diez años cuando delante de mi gran cantidad de personas que solicitaban la visa, eran rechazados uno tras otro pese a llevar consigo todo tipo de documentacion probatoria.
Como me deshice por indicacion de mis guias de mucha documentacion de la Tierra, inclusive pasaportes anteriores, no tenia nada que mostrar. Mi pasaporte tiene ingresos a paises arabes y a Colombia. Tengo en el, sellados de la visa a Jordania
Nadie miro nada…
Tampoco me pidieron un solo papel…
Cuestion de fe y obediencia. Aun sobre lo que no se sabe y lo que no se comprende, en ese momento es en el que el Espiritu ingresa.
Estados Unidos, Sedona, el Gran Cañon del Colorado. Rodeamos en doce horas el territorio indio Navajo y Hopi, estabamos petrificados de frio.
Amanecimos en el Gran Cañon… espectacular.
Brinda Mair